En el Parque Nacional Copo hay una lucha interminable


En el extremo norte de la provincia, los traficantes también están al acecho. El guardafaunas del Parque Nacional Copo, Álvaro Alsogaray, dijo que la lucha contra estos delincuentes es permanente, aunque se agudiza en invierno, cuando la escasez de agua obliga a los animales a salir a las rutas y represas, donde son capturados para la venta.

“Aquí se le dice la época de mataquear. Es decir, el tiempo en que la caza de los pichi bola es más fácil, porque en la temporada de lluvias los animalitos permanecen en zonas donde no se puede ingresar”, explicó.

El Parque Nacional Copo tiene una extensión de 118.000 hectáreas, más 85.000 del parque provincial, que está al lado. Toda esta zona es custodiada por Alsogaray y su gente, además de los guardaparques de la provincia.

De todas formas, considera que la mejor forma de proteger a las especies locales es haciendo prevención mediante la presencia permanente, porque perseguir a los cazadores sería casi imposible, por la extensión del terreno y por los innumerables caminos que existen.

En esta parte de Santiago del Estero, las especies más buscadas son los tatú carreta y las lampalaguas, aunque también son codiciados los pecaríes y otras especies que van a parar el mercado negro.

Fuente: www.elliberal.com.ar



11 de Abril de 2011

Comentarios



  1. #1   Sebastian L. dijo: 11.04.2011 - 14:22hs Acá se menciona un tema crítico: Represas.

    Pregunto, hay muchos cursos de agua modificados que obliga a los animales a salir del Parque?

    Si es así, y obviamente es una pregunta de ignorante; no habrá manera de que de esas represas se haga un desvío, por lo menos mínimo, que haga que exista algun curso de agua garantizado en el area protegida?

  2. #2   Diego S. Olivera dijo: 13.04.2011 - 22:49hs Hola Sebastián,
    en este caso es muy posible que el término represas haga referencia a embalses artificiales de agua pequeños a los que se conoce también con el nombre de tajamares, en especial en provincias del litoral y nordeste argentino. en general son de muy reducida superficie y hasta unas pocas hectáreas. No tienen ni por asomo la superficie de las presas con destino a la hidroelectricidad y la función principal es almacenar agua para el ganado en región de estrés hídrico anual o estacional como en el chaco seco y en el espinal. Y en muchos casos los animales salen a las rutas por miedo, escapando, o bien se refugian en las aguas de las "represas" o tajamares o bien en los arbustales que prosperan en sus márgenes.
    saludos
    Diego

  3. #3   diego dijo: 19.04.2019 - 22:36hs He observado que la dureza mental de los administradores de parque nacionales conllevara a la extinción de las especies que dicen proteger. Ya lo he visto en parque nacional Chaco que por no poner un molino para proveer agua en épocas de seca, cuando ello ocurrió perdieron gran parte de las especies que en su busca salieron a campos vecinos donde fueron cazadas-ultimadas, si no cambian urgente la política de prohibición de proveer agua a los animales en épocas criticas, se perderán las especies mas importantes y solo arboles tendrán en sus limites. Lo digo por conocimiento de campo y no porque solo me parezca.. pongan-sen las pilas



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