Acorralada por el agua de la represa Urugua-í, la pequeña superficie de 160 hectáreas es el lugar elegido por el lobo gargantilla, la especie de nutria más grande del mundo que está en peligro de extinción, y el yaguareté, cuya población está diesmada por el demonte.
Concluyó el primer inventario de flora y fauna de un lugar emblemático de Misiones: la Isla Palacio, el último escenario del pato serrucho y el lobo gargantilla, el escenario elegido por reconocidos naturalistas y científicos por su extraordinaria riqueza natural.
La Isla Palacio está ubicada en el arroyo Urugua-í. De sus 1600 hectáreas originales, sólo quedan 160. La creciente que llegó con la construcción de la represa se llevó el 90 por ciento de la superficie. Sin embargo, este lugar de referencia histórica, cultural y natural alberga un sinnumero de animales y plantas nativas de Misiones.
Así lo revela un relevamiento realizado entre mayo de 1998 y abril de 2011 por Jorge Anfuso y Silvia Elsegood, del Centro de Rescate de Fauna Silvestre de Misiones. Los expertos en rehabilitación de animales autóctonos constataron en la Isla Palacio la presencia de 106 especies de aves; 27 especies de mamíferos, entre ellas el yaguareté y el lobito de río; 23 especies de anfibios, reptiles y batracios; 129 especies de mariposas; 26 especies de peces; 39 especies de árboles; 31 especies de enredaderas; 10 especies de helechos y arbustos; y 15 especies de orquídeas y otras epífitas.
La Isla Palacio “todavía guarda tesoros invalorables”, advierte con satisfacción Jorge Anfuso, con quien dialogamos:
Si tuviera que resumir brevemente el relevamiento, ¿qué puede decirnos teniendo en cuenta la drástica reducción de la superficie de la isla y la cantidad y variedad de animales observados en ella?
Que la isla a pesar de su escasa superficie, todavía guarda tesoros invalorables. Águilas como la spizastur y otras aves amenazadas, tapires y el yaguareté recorriendo sus costas, certifican que a pesar de su modificación aún estamos a tiempo de salvar lo que queda, no solo en la isla sino en sus costas vecinas, ya que como dije en el relevamiento realizado, encontrar 7 huellas de diferentes mamíferos en un mismo sector nos da una idea de su incalculable valor.
A lo largo del relevamiento, entre los años 1998 y 2011, ¿notaron Ustedes cambios? Por ejemplo, mayor o menor presencia de una especie?
En general, no hemos notado cambios notables, solo cambios por presencia estacional, tanto de mariposas como de aves. En los mamíferos siempre su presencia es permanente.
El yaguareté, por ejemplo, últimamente hemos observado que se ausenta con más frecuencia que antes. Por momentos pasan meses que no se encuentran huellas ni en la isla ni en las costas frente a ella. Sin embargo casi todo el año obtenemos algún registro.
También hemos notado una disminución en la cantidad de yacarés que en el año 2003 se encontraban en los alrededores de la isla. Posiblemente sea por caza furtiva y hasta da que pensar si no comercial. En el 2003, salíamos con reflectores y a remo a recorrer sus costas y en poco tiempo podíamos obtener unos 20 avistajes. En el 2006 y 2010 en relevamientos nocturnos solo observamos entre 8 y 4.
Lo mismo pasa con el carpincho, que paso a ser muy abundante en todo el perímetro del lago Urugua-í . Pero sufre persecusión por parte de cazadores furtivos. Hemos encontrado animales muertos flotando con heridas de bala que certifican nuestra sospecha.
Los Guardaparques Provinciales y Policía Lacustre si bien recorren y patrullan toda la zona, es casi imposible frenar al furtivismo. Las leyes no castigan con severidad estos actos ilegales pues cuando los guardaparques logran detener al furtivo, este se escuda en su condición de poblador “pobre y en necesidad” pero lo cierto es que va en vehículo, usa escopeta, obtiene o arma sus cartuchos de orígen Brasil (agravando su ya ilegal posición). Deberíamos capacitar a los jueces por los delitos medioambientales, solo así quienes nos sucedan tendrán las mismas posibilidades que tuvimos nosotros de contemplar a la fauna silvestre en su ambiente natural.
¿En qué radica la importancia de este relevamiento?
En poder conocer más en profundidad la necesidad de la isla y hasta donde la podemos aprovechar. Solo hasta ahora se habían realizados algunos relevamientos importantes antes de producirse la inundación. Después y en acertada decisión fue declarada Monumento Natural Provincial y todo lo realizado en custiones de relevamientos, fue muy escaso y aislado. Ahora podemos determinar cantidad y calidad de fauna, por ello la necesidad de completar el relevamiento e invitar a especialistas y técnicos para certificar lo realizado y ampliarlo seguramente.
- Una vez finalizado este relevamiento y presentado al Ministerio de Ecología, ¿cuál es el próximo paso?
El objetivo es realizarle un Plan de Manejo. La Fundación de Historia Natural Félix de Azara tiene los técnicos y personal capacidato para desarrollarlo y se ofreció a concretarlo, solo debemos evaluarlo con los técnicos del Ministerio de Ecología para realizarlo en conjunto. Sería muy importante para el futuro de la Isla Palacio y se podría ampliar al Lago Urugua-í, aunque yo comenzaría por la isla.
- En el informe sobre el relevamiento Ustedes relatan la experiencia de Proyecto Margay que ha sido exitoso, y proponen la Isla Palacio como “Campo de Entrenamiento para la Rehabilitación Controlada de Fauna Silvestre”. Cuéntenos la importancia de este trabajo para la conservación de la fauna nativa.
El Proyecto Margay fue un proyecto inédito en el país. Demostró que con pocos recursos es posible evaluar la capacidad de un animal de cautiverio total, que tras un manejo adecuado fue liberado con telemetría y realmente esa reintroducción fue exitosa. Pero ese éxito se debe a que existe la Isla Palacio y que permite esta posibilidad como casi en ningún otro lugar de nuestro país. Por eso debemos protegerla y cuidarla para que no altere su condición de “intangible”solo así es posible utilizarla con otras especies de animales.
Hoy tenemos en la isla coatíes y monos casi todos provenientes de decomisos de fauna por parte de guardaparques, Policía y Gendarmería Nacional. Con un manejo adecuado logramos adaptar grupos de estos animales en Guira Oga, llevarlos a la isla, monitorearlos por radio telemetría, cámaras fototrampas, observaciones directas y hemos comprobado que todos se han rehabilitado muy bien.
En síntesis, la isla es utilizada como “Campo de Entrenamiento para la Rehabilitación de Fauna Silvestre Misionera” y pueden involucrarse muchos mamíferos (y hasta algunas aves) en ese proceso de rehabilitación. Gracias a la Isla Palacio, hoy es posible que muchos animales condenados a jaula de por vida, tengan una oportunidad de volver a la naturaleza.
Fuente: El Paranaense
Comentarios
#1 Diego S. Olivera dijo: 20.01.2012 - 08:51hs muy bueno!! felicitaciones!! un trabajo incansable el de Ustedes! abrazos. Diego
#2 German Prancetti dijo: 21.01.2012 - 13:41hs Buen tabajo espero que mejoren las leyes con el furtivismo, Felicitociones por todo.
German.
#3 Mariano Costa dijo: 14.02.2012 - 15:10hs Buen informe t esperanzador, además. Felicitaciones!