El único guardaparque de la reserva natural Isla del Sol aseguró que el sector se ha convertido en "tierra de nadie" por la falta de vigilancia que hace propicia el continuo accionar de ladrones y vándalos. La semana pasada, a plena luz del día, varias personas robaron al menos unos 100 metros de rieles de las vías que ingresan al paraíso natural situado a sólo cinco minutos del centro de esta ciudad.
"Yo estoy sólo aquí en la reserva, donde permanezco hasta las 14. Cuando me retiro esto queda solo y allí aprovechan los ladrones y vándalos para hacer de las suyas. Es tierra de nadie", denunció el guardaparques Edgardo Fontana, quien junto a un beneficiario de un plan social otorgado por el gobierno son los únicos funcionarios destinados al cuidado de esta área protegida de incalculable valor natural.
Recurso extraordinario. "Tenemos en nuestra ciudad un recurso extraordinario frente al río Paraná y existe una postura muy liviana sobre el tema, porque no se le otorga a esta reserva la importancia extraordinaria que tiene", señaló Fontana.
Años anteriores, guardias municipales permanecían en el lugar durante las 24 horas, pero luego esos agentes fueron destinados a otras dependencias y la zona quedó absolutamente desprotegida.
En ese contexto, "toda una cuadrilla de hombres que ingresan con un carro trabajaron con picos y palas para sacar los rieles existentes y se los llevaron", denunció el guardaparque.
Si bien existe una comisión de resguardo y protección de la valiosa reserva natural, Fontana reveló que este grupo de personas "no son tenidas en cuenta por las autoridades".
"La comisión ha planteado algunas propuestas interesantes y coherentes. Tenemos elaborado un plan de manejo de la reserva, pero lamentablemente nadie nos escucha y actúa en consecuencia", añadió.
Uno de los integrantes de esta comisión, el titular del Centro Ecologista Renacer, Miguel Alfaro, sostuvo que "estos lugares están a merced de operaciones de saqueos y las autoridades políticas deben dar una explicación del por qué hay una indiferencia que no es de ahora, y que se repite en Villa Constitución".
Dar piedra libre. "En otras ciudades comprometidas con sus riquezas naturales esto no ocurre. Aquí, la falta de presencia de la autoridad municipal es como dar piedra libre para que los vándalos actúen impunemente".
La reserva natural Isla del Sol es un área protegida que comprende 330 hectáreas y, pese a ser una isla, se puede acceder a ella mediante un camino que la une a la ciudad. El sector es un paraíso donde se mueven libremente nutrias, lobitos de río, carpinchos, comadrejas y hasta lagartos overos. Es posible verlos entre los sauzales, montes de alisos, ceibos y curupíes, mientras las garzas, aguiluchos, cormoranes, gaviotas o chorlos se posan en sus copas.
Fuente: www.lacapital.com.ar
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